ERUDITOS

Reflexiones de Medio Día (21-07-2017)

Hora: 11.40 pm

Mis años en la universidad fueron la mejor época, tuve muchos profesores,cada uno diferente,con sus estilos , con sus manías y sobre todo con sus verdades, en muchos casos lo mejor era quedarse callado y no decir nada en la clase, que al profesor le fuera a molestar y no tuviera mas nunca la oportunidad de aprobar.

Presencié situaciones, donde muchos compañeros de clase que se atrevieron a participar en clase y fueron tan avergonzados por el profesor, que varios de ellos al día siguiente no regresaron y muchos sabíamos que era por el acto de humillación, que le hizo pasar el docente.

Recuerdo el caso, de una compañera que se atrevió a cuestionar al profesor frente a todos, este reacciono de una forma con mucho sarcasmo y le recomendó esto:

_ En mi casa, mi esposa necesita, una muchacha de servicio, deberías considerar tomar ese empleo, porque aquí no vas a llegar al final, eso te lo aseguro-

Dicho y hecho, esta joven no logro graduarse, parecía, que después de ese incidente, todos los profesores fueron duros con ella, hasta que se hartó y se cambió de facultad.

También observe, que no siempre él tiene las mejores calificaciones, podía aspirar a tener un cargo en la universidad, se debía ser “jalabola” con el jefe de departamento, salir a beber (brindarle cervezas) al docente de la cátedra y hacer mucha operación colchón, situación que todos sabían, pero era un secreto a voces.

Hubo el caso de Hernán, que era un buen estudiante, no era un erudito  pero se destacaba, curso una cátedra y se hizo buen "amigo" del profesor, obtuvo una calificación que la totalidad estuvimos en desacuerdo, hasta fue promovido como ayudante, que era el primer escalón para llegar a ser docente de la universidad, al finalizar la carrera.

Hernán hasta dejo a su novia, pero llego a ser docente de la Universidad, ocupo la cátedra de este profesor, la mayoría  supimos que se “ayudó” con el apoyo del profesor, muchos pensamos que eran pareja,  para andar para todos lados con su mentor.

Un viejo compañero de clases decía:

_Así funciona esta jungla, no la podemos cambiar

En la universidad, descubrí que había mucha injusticia, discriminación y arbitrariedad,  parecía en muchos casos como una jungla, donde los depredadores salían todos los días, a cazar sus presas, sin importar como se llegaba a ese éxito o aprobar una cátedra.

Una jungla, donde sobrevive el más fuerte

Son Reflexiones de Medio Día

MSc. Ronal Julio Bravo Semprun

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Maracaibo/Edo.Zulia/Venezuela

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