LA CHICA DE ROJO

Reflexiones de Medio Día (25-08-2021)
Hora: 1.40PM

Ella se llamaba Alejandrina, la conocí en la etapa final de mi carrera, ella tenía una larga cabellera roja, una preciosa chica de 21 años pero según su propia boca tenía más experiencia en parejas que la misma Elizabeth Taylor, estudiaba sociología , aunque su mayor deseo era ser abogada de la república.

 

Ella llego a mi vida porque  era amiga de Juan Luis, al parecer tuvieron algo, una pequeña relación pero que no llego a ser porque ella andaba con rollos con su novio actual, que después finalizo y salió al mundo a ver que se le pegaba y ese fui yo.

 

Debo reconocer que al principio salí con ella para tener relaciones rápidas y después irme, como lo hacía de costumbre, pero con el tiempo uno se involucra , conoce sus secretos y hasta empieza ser parte de sus planes, situación que empieza ser agradable, por las atenciones, la protección y sobre todo uno se siente bien.

 

Primeramente estuvo de novia con un colombiano llamado Davicito, que tenía todos los atributos tenia plata, carro y buen parecido. Después tuvo a Jorge un medico algo mayor que ella, pero que lo dejo para volver con el colombiano, que al breve tiempo termino y ahí aparecí yo.

 

_ Ella solo busca hacerle presión a Davicto contigo- me decía Juan Luis

 

Empezamos una relación formal, iba su casa, ella fue la primera novia que conoció mi abuela, hasta empezó hablar de matrimonio, cosa que me pareció fuera de lugar, pero trate de  no molestarla, no haciéndole caso.

 

_ Yo me quiero casar joven, quiero ser una madre joven, no voy a esperar 5 años para hacerlo- me repetía

 

Debo reconocerlo, cuando escuche eso debí salir corriendo, hasta una vez termine con ella, pero se volvió un manejo de lloriqueos, me dio ladilla y no pude continuar con mi huida.

 

No era fácil ser su pareja, era domínate, mal humorada, además cada vez que salíamos se terminaba peleando con alguien, no le gustaba que fuera a la facultad.

 

_ No veo el día, que no vallas más a la facultad- me repetía a cada rato

 

Si lo vi venir, era sencillamente ese tipo de mujeres, que te cortan los testículos y te quitan la autoestima hasta convertirte en un casi hombre.

 

Con ella simplemente iba al desastre...

 

 (Tomado de mi libro: “DESDE LA PROVEEDURÍA”)
 
Son Reflexiones de Medio Día
MSc. Ronal Julio Bravo Semprun
Twitter: @Reflexionesmd
Instagran: @Reflexionesmd
Santiago de Chile/Comuna San Miguel/Chile
 
NOTA: SE PROHÍBE LA REPRODUCCIÓN PARCIAL O TOTAL DE ESTE ARTÍCULO SIN LA AUTORIZACIÓN DEL AUTOR

LA COLOMBIANA

Reflexiones de Medio Día (19-08-2021)
Hora: 1.05 PM

                          

  

“A cada cochino le llega su sábado”, este dicho popular es muy verídico, durante mi época de estudiante universitario, fui asiduo a conocer y compartir con muchas damas, que a pesar de la crítica nunca se hizo por deporte, simplemente para pasarla bien, pero era verdad ese sábado iba a llegar.

                        

 

Desde la proveeduría la vi pasar, era una morena preciosa, alta con rasgo casi de modelo, según pude averiguar estudiaba Educación en orientación, con una sonrisa que impresionaba a cualquiera, no quedaba duda  no la conocía personalmente, pero estaba prendido por ella.

 

Una tarde se acercó a la proveeduría  a comprar hojas blancas, como no había nadie por atender aproveche para hablar con ella, la note muy receptiva conmigo, hasta dispuesta a relacionarse y darse a conocer, eso me gusto, se llamaba Beatriz, por su forma de hablar entendí que era colombiana y debo asumirlo me hipnotizo.

  

Así fue, prácticamente fue rápido, en una semana estaba con ella, era su novio, todos nuestros amigos lo sabían, ella me buscaba y estaba pendiente de mí, a su temprana edad trabajaba como maestra en una escuela y estudiaba en la noche, debo reconocerlo deje de buscar otras amigas, aunque ellas me buscaban a mí , siempre Beatriz estaba de primero.

 

Los primeros 6 meses pasaron rápidamente, hasta empecé a hablarle de conocer a su familia, visitarla en su casa los fines de semana, cosa que a ella no le gustaba, quería que estuviéramos siempre en la universidad, nunca quise presionarla en ese aspecto, pero yo quería algo más formal.

 

Salimos al cine, a comer, a fiestas  y salimos de viaje a Caracas  con la universidad, que siempre me demostró que esta relación más allá de la plazoleta de humanidades podría ser posible, pero al llegar los periodos de vacaciones ella se desapareció, no me llamaba por teléfono y no había forma de ubicarla.

 

De regreso de esos periodos vacacionales siempre me molestaba, pasaba días sin verla, ahí empecé a ver de nuevo a mi alrededor, había muchas chicas que querían ese  lugar, además parecía que cuando uno andaba con novia, todas querían algo conmigo.

 

En uno de esos periodos vacacionales, termine con ella, de forma que ella no se lo esperaba , mucha gente me lo critico ,me dijeron que salía perdiendo, por unas semanas me aleje de todo lo que significaba ella, pero que va no podía olvidarla, un día que no me tocaba ir en la mañana, fui a buscarla, pero me lleve una gran sorpresa.

 

Solo habían pasado 2 semanas desde que habíamos terminado, cuando veo a una amiga de ella, le voy a preguntar si sabe dónde está y esta me responde:

 

_ No la he visto, a pero mira este es el novio de Beatriz- me comento señalándolo

 

“Diablos...un novio”- pensé pero no salía del shock

 

-Hola- le salude, era una cara conocida, este jugaba futbol en un equipo de la ciudad y de vez en cuando salía en la prensa deportiva.

 

Así fue, me quede a la distancia, Beatriz llego lo beso en los labios, le dio un fuerte abrazo y le tomo las manos, se veían tan bien, enamorados y sobre todo felices, como se pudiera ver una pareja recién unida, sé que ella sabía que estaba por ahí, siento que vio esa mañana.

 

Algo en mi sabía que la había perdido, que no volvería a su lado, con el tiempo supe que este novio se transformó  en su pareja oficial, conoció a su familia y con los años en su esposo, para darme animo pensé que quizás él se la merecía mas yo.

Me quede con esos recuerdos, donde sentí que el amor era posible. 

Desde ese momento sentí que mi etapa en la proveeduría estaba por finalizar...

 (Tomado de mi libro: “DESDE LA PROVEEDURÍA”)
 
Son Reflexiones de Medio Día
MSc. Ronal Julio Bravo Semprun
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Santiago de Chile/Comuna San Miguel/Chile
 
NOTA: SE PROHÍBE LA REPRODUCCIÓN PARCIAL O TOTAL DE ESTE ARTÍCULO SIN LA AUTORIZACIÓN DEL AUTOR