Reflexiones de Medio Día (08-06-2013)Hora:12.51 am
Román
a los 14 años se fue a vivir con su
padre, era una experiencia nueva para él, nunca había vivido más de una semana
con su progenitor, pero alimentaba muchas expectativas de compartir con él,
durante su infancia siempre lo tenía presente en su mente pero fue una gran ausencia,
su abuela Barbará que lo había criado desde un año de nacido, no vio con buenos
ojos esa decisión, pero simplemente lo dejo tener esa equivocación.
La
experiencia fue muy desagradable, se encontró que su padre era un ser despreciable,
que golpeaba a cada pareja de turno, que nunca ha vio de ningún hijo, que poseía
problemas de bebida y juego, que lo maltrato físicamente y verbalmente por no
ser ese hijo activo como él, nunca se preocupo si almorzaba o cenaba, si había
ropa limpia o si iba al colegio y cuando se enfermaba sencillamente decía “cúrate
tu solo”, y al cabo de ese año lo regreso al cuido de abuela Barbará, como si
fuera un gran peso para su vida. Y lo que marco la ruptura:”a mi padre nunca me
dio nada porque debo hacerlo yo contigo”
le dijo algo borracho en una tarde sabática, descubrir un monstruo.
Román
no busco mas a su padre, estrictamente encuentros familiares muy esporádicos, siempre reflexiono esta pregunta: ¿Porque papá fue tan alejado e indiferente de mí?, quizás porque
su padre así lo fue, quizás yo le recordaba a mi madre y eso le molestaba, o
sencillamente era un ser egoísta que solo se preocupaba por su existencia.
Román
se prometió ser el padre que nunca tuvo para sus hijos.
(Tomado
de mi Novela “La Cofradia”)
Son
Reflexiones de Medio Día
Msc.
Ronal Julio Bravo Semprun
rjbs71@outlook.com
Twitter: @Rjbs71
Maracaibo/Edo.Zulia/Venezuela