UNA MUCHACHA DE OJOS COLOR CAFÉ

Reflexiones de Medio Día (09-06-2018)
Hora: 5.20 PM

Carmen era una loquita, que comente en “Crónicas Inesperadas” que aspiro a ser cantante, pero tuvo debut y despedida que estuvo lleno de aplausos, pero gracias a las canciones de novel Shakira, por lo menos el ridículo se disimuló, pero era más que evidente que no cantaba ni en el baño.

Ella tenía unos ojos color café, era un personaje más de la facultad de humanidades, estudiaba letras, pero no asistía a clases, tenía más 10 años estudiando, la universidad  le ofrecía desayuno, almuerzo y cena, con el tiempo se hizo amigos de los que trabajaban ahí y siempre le preparaban un paquete para comer los fines de semana, además del seguro  médico y odontológico, graduarse no era alternativa.

En la Universidad había una norma académica que se llamaba RR, también llamada “regreso al rancho”, que significaba que solo se le exigía aprobar una cátedra por año y no perder el cupo, por lo tanto Carmen se aprovechaba de esta “normativa”, inscribía full el semestre, para solo asistir, cursar un solo crédito y casi siempre era la más fácil, utilizando algunos métodos pocos convencionales como regalos y hasta la operación colchón.

Era un show verla cada día, su ropa reflejaba su estado de ánimo,  una vez tenía una relación con muchacho afro descendiente, se empezó a vestir como ropas al estilo africano, asi mismo, después se hizo novia de guajiro venido de la sierra de Perijá, que se volvió a propia reina de los indígenas y para completar también tuvo un novio árabe, lo cual la convirtió en la más defensora de lo  causa palestina y vestida al estilo de mi bella genio.

A raíz de eso empezó a enseñar danza árabe a otras estudiantes, en la plazoleta de la facultad llevaba su radio y se le veía muy disciplina con la clase, fue tanto lo que se involucró con este novio, que más de una vez se le observo en las protestas frente a la embajada americana de Maracaibo y en la quema de banderas del tío Sam por sus atropellos por el mundo.

Decía que se debía sacar a MacDonal, a Burger King y a Wendys de Venezuela, porque envenenaban a los consumidores, había días que se aparecía en el comedor universitario y comenzaba hablar de la lucha frente al capitalismo, que llegaba un momento que ya fastidiaba.

Le tuvo un hijo al árabe, pero este se desapareció de su vida, simplemente se graduó y este se dio cuenta que Carmen era solo para pasar un rato, no para formar un hogar, deje de saber de ella porque como todo estudiante serio también obtuve mi título y deje de ir un tiempo por la facultad.

Pasados los años, fui a mi vieja facultad a ver las alternativas que tenía para hacer mi postgrado, cuando llego y escucho:

_ El imperialismo yanqui, solo busca aniquilar a las naciones progresistas como Venezuela- escuche una voz que buscaba llamar la atención de la gente.

Era Carmen la loquita, que seguía en la facultad  con sus cuentos, habían pasado más 10 años, a pesar que yo no la conocí personalmente, me atreví a saludarla:

_ Hola Carmen, ¿cómo estás?

_ Hola, bien ¿y tú te vienes a inscribir?-me dijo como si me conociera de siempre, hasta un beso y abrazo me dio.

_ No, vengo a saber de los postgrados-

_Yo estoy casi para graduarme, me faltan 3 materias y la tesis, aunque no quiero mucho terminar…

Ahí quedo por un rato hablando de su vida, la facultad y de sus niños, esta mujer  de ojos color café, que ya no era una muchacha, seguía creyendo en sus potenciales y sus sueños.

_Siento que Dios me tiene algo grande  y bueno reservado para mí.

Todavía lo debe estar esperando

Son Reflexiones de Medio Día

MSc. Ronal Julio Bravo Semprun

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Santiago de Chile/Comuna San Miguel/Chile

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