NEW YORK, NEW YORK

Reflexiones de Medio Día (06-09-2017)
Hora: 5.10 pm

En los años 90, siendo un adolescente vivía con mi abuela Olga y mi hermano mayor, ella en los meses de Julio, Agosto o Septiembre , se iba con mi tío Yichson de vacaciones, eso provoca que me quedaba sin su supervisión en el apartamento y podía hacer de las mías.

En esa época mi abuela visito las islas de Aruba, Margarita, Curazao, las ciudades de Miami y Mérida, en varios periodos vacacionales, siempre ella me dejaba dinero, comida y un rosario de normas, obligaciones y hasta amenazas para portarme bien.

_ ¡No me vais a dejar el apartamento hecho el diablo!-repetía constantemente antes de irse para su merecido descanso, claro yo no le hacía caso, esos días eran de fiesta, amigas, música, comer fuera de las horas, sobre todo mucho desorden

Cuando ella regresaba, decía muy molesta:

_ ¡No te podéis comportar! esto parece un arrabal- Yo escuchaba, no le decía nada, me iba  a la calle, por supuesto la había pasado bien, unos regaños que eran los primeros que me habían dado, ni serían los últimos.

Pero en el 1992, mi tío le compro unos pasajes para visitar la gran manzana y pasara un mes con sus sobrinas,que vivían en la ciudad de New York desde hace varios años.

_ Se armó un limpio- pensé en todo lo que iba hacer en ese mes.

Antes de irse, mi tío me recomendó:

_ Ronal , trata de limpiar un poco antes , que ella vuelva.

_ Ok tío-le dije casi automático, pero pensando en las fiesta que venía.

Efectivamente fue un mes de locura, muchas amigas me visitaron, fiesta y cerveza, con una gran cantidad de platos sucios, el apartamento parecía que había sucedido una guerra campal.

Dos días antes de su regreso compre; jabón, cloro, desinfectante y lavaplatos, me puse a limpiar el apartamento, lave los platos, limpie los pisos, fregué la cocina, acomode la sala , mueble y su cuarto, para eliminar cualquier rastro o evidencia de esas celebraciones.

El apartamento había quedado limpio, pulcro, oloroso y pensé que a abuela le gustaría, pero no fue así:

_ ¡Esto parece un basurero!- me dijo sin ni siquiera revisar el estado del apartamento.

_ Abuela yo limpie-dije

_¡Qué vas a limpiar!- me dijo muy molesta

Me volví a ganar el rosario de regaños, a pesar de haber limpiado como me había recomendado mi tío, me resigne y me volví a ir a la calle.

A los días fue la prima Irasema, sobrina de abuela, que tenía la costumbre de ir a limpiar cada quince días el apartamento y que por supuesto durante ese viaje no había ido

_ Tía Olga, esto está limpio-dijo mi prima

_ ¿Sí?-dijo sorprendida-¿Ronal vos limpiaste?-me pregunto

_ Si abuela yo limpie, yo te dije al llegar-respondi

_No hace falta comprar nada para limpiar, hay cloro y desinfectante-dijo Irasema

_ ¿Compraste?-me volvió a preguntar

_ Claro, había que limpiar, compre y limpie-dije

_ Ummm, está bien- dijo Abuela discretamente cambiando el tema.

Ese “Ummm” me basto, abuela supo que había limpiado, que había limpiado el desastre que había hecho, mientras ella disfrutaba la ciudad de los rascacielos.

Y como diría Frank Sinatra en su canción “New York New York”:

“Si puedo llegar allí,

Llegare a cualquier parte.

Depende de ti,

New York, New York”

Son Reflexiones de Medio Día

MSc. Ronal Julio Bravo Semprun

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Maracaibo/Edo.Zulia/Venezuela