Reflexiones de Medio Día (04-11-2018)
Hora: 3.40 PM
En
mi época universitaria, también conocí de situaciones lóbregas y de personajes
deprimentes, que de muchas razones colocaron a la lustre Universidad del Zulia,
en un lugar lejos de ser un sitio de formación académica, era un centro de decadencia
y perversiones, que casi siempre nadie pagaba por sus actuaciones oscuras.
Hubo
el caso de las sectas satánicas, que eran personajes que se vestían con ropas
negras, cabellos largos, tatuajes y algunos sin bañarse, que reclutaban a jóvenes
de ambos sexos, que los llevaban al consumo de drogas, consumo de alcohol y a
orgias, que se veía a media cuadra su cambio de conductas.
Se
observaba en las plazas, resto de velones que habían sido prendidos en la noche
anterior, dibujos de estrellas, una especie de lobo con cachos y una gran
cantidad de botellas de ron vacías, con cadáveres de gatos que le habían sacado
la sangre y que evidenciaba que se había practicado algún rito.
La
muerte de una joven que estudiaba letras, prendió las alarmas de algo que se
comentaba en silencio diariamente, provocando que estos grupos desaparecieron
por un tiempo, algunos comentaban que se habían ido a la ciudad de Valencia,
pero al calmarse la situación uno a uno fue regresando , pero vestidos de ropas
normales o disfrazados de estudiantes, para no llamar la atención , muchos
comentaban que seguían sus prácticas de adoración al diablo .
También
había el caso de las violaciones de lindas muchachas, en los baños de la
facultad, después de las 8 de la noche, era recomendable que toda bella dama se
aguantara las ganas, evitarse algún mal momento, que indudablemente iba a marcarle
el resto de su vida.
Casi
siempre eran muchachas que estudiaban comunicación social, estas eran las más
bellas de la facultad, parecían modelos, muchas eran aspirantes de actriz o
animadoras de televisión, fueron las víctimas de esta ola de violaciones, que
ninguna quiso denunciar la agresión.
Supe
de 3 jovencitas que fueron violadas, el agresor primeramente las sometía con algún
somnífero, estas se despertaban al cabo de unos minutos con el pantalón y su
ropa interior bajada, pero sin evidencia de penetración en su zona genital,
pero si con alguna evidencia de un acto lascivo.
Según
se comentó, se pensaba que podría ser alguna mujer que estudiaba educación física,
que eran las mujeres con preferencia sexual para otra mujer que se veían en la
facultad, se sospechaba de una, que debo reconocer que solo le faltaba un pene,
porque era más masculino que muchos hombres.
Al
suceder el tercer asalto sexual, las agresiones terminaron, muchos comentaban,
que la principal sospechosa se había graduado y se había ido de la facultad.
Estos
casos y otros que sucedieron en mi tiempo de estudiante universitario, no
fueron conocidos públicamente, ni denunciados externamente, por existir la cláusula
de la autonomía universitaria.
No
todo era una fiesta,
también había gente perversa esperando atacar.
Son
Reflexiones de Medio Día
MSc.
Ronal Julio Bravo Semprun
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@Reflexionesmd
Instagran:
@Reflexionesmd
Santiago
de Chile/Comuna San Miguel/Chile
NOTA:
SE PROHÍBE LA REPRODUCCIÓN PARCIAL O TOTAL DE ESTE ARTÍCULO SIN LA AUTORIZACIÓN
DEL AUTOR
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