(31-07-2011 /hora: 2.53pm)
Hace años cuando era adolescente fui testigo como mi tía Luisa hermana de mi abuela se enfermo de cáncer en las mamas, de la cual fue operada y tuvo un fuerte tratamiento de quimio terapias , vi como lentamente se fue deteriorando su salud y su estado físico, vi con muchas tristeza como se le caía el cabello, ella lo disimulaba con sombreros y con unas especies de turbantes, yo nunca la vi triste o molesta siempre la vi con mucho optimismo y planificando su futuro siendo un mujer fuerte como lo fue al levantar a sus hijos sola sin la compañía de un esposo, supongo que ella en su soledad , con su hermana que era mi abuela o con sus hijos se mostro débil o triste con su enfermedad, la familia de abuela eran personas que trabajaban al día para satisfacer sus necesidades básicas del hogar. Unos días de Septiembre del 1986 ella en compañía de una de sus hijas llevo a la casa a mi abuela, de paso aprovecho subió al edificio yo vivía en un piso 5 y me saludo, recuerdo su sonrisa y me dio la bendición, dos semas después ella falleció. Pareciera que fue a despedirse de mí, siempre me gusta pensar que fue así.
Con el tiempo me entere que ella por años mantuvo en secreto su enfermedad no quiso informárselo a sus hijos debido a lo costoso del tratamiento médico y porque ella pensaba “con qué dinero si algunas veces la comida no alcanzaba en la casa”, mantuvo el silencio hasta que no pudo aguantar el dolor en mamas, lo comunico, fue llevada al médico, fue operada y solo le dieron dos años de vida, recuerdo que en el velorio uno de sus hijos lloraba y se lamentaba por la tardía decisión , otro se afligía por la pobreza que fue la verdaderamente la causante de su muerte. Todos tenemos historias de familiares, amigos o conocidos que esta enfermedad se ha llevado que se han visto abrumado por los gastos médicos, estas pérdidas han dejando en el ceno de las familias una gran herida que solo el tiempo ha podido curar.
Los enfermos de cáncer de mi pais deben tener una atención digna y pronta a su necesidad, que nadie fallezca por falta de recursos monetarios , no sea este país que la cuarta como quinta republica esta enfermedad es sinónimo de penuria, pobreza y en la mayoría de los casos de muerte ,por los gastos que genera el tratamiento médico en medicamentos, quimias y radiologías, Solo un deseo que es en esencia de la mayoría.
Son Reflexiones de Medio día
Msc. Ronal Julio Bravo Semprun
Maracaibo/Edo.Zulia/Venezuela
